La creación más poderosa del hombre

Dios abandonó los cielos, los ángeles entran en crisis, la humanidad comete todos los pecados escritos en la Biblia, el Infierno no tiene más espacio y vos, hijo del Hombre, criatura de acero y circuitos, te vas a adentrar al Inframundo para saciar tu hambre y sed en una lucha por seguir encendido. Porque lo único que hace el humano es destruir y deformar lo que alguna vez fue hermoso. Si nada de esto te llama la atención, entonces andá a mirar otra reseña, porque hoy vengo a hablar de ULTRAKILL.

¿Qué pasaría si el DOOM Slayer y Dante de DMC tuvieran un hijo? ULTRAKILL es un frenético, retro y utraviolento FPS indie en Early Access siendo desarrollado por Arsi «Hakita» Patala y publicado por New Blood Interactive. Inspirado en clásicos como DOOM (1993), Quake y Devil May Cry, este juego combina todo lo lindo de estos FPS como el frenetismo, la brutalidad y la adrenalina de un juego «Run ‘n Gun» añadiendo el sistema de estilos que tendría un hack & slash.

El Doom’s Like de los FPS indie

Como buen amante de las sagas DOOM, Devil May Cry y de los juegos indies en general, enterarme de la existencia de ULTRAKILL fue una grata y hermosa sorpresa. Pero, ¿Por qué? ¿Por su frenetismo? ¿Por su gran variedad de armas? ¿Por la relación que tiene con los ángeles y demonios? Bueno, sí. Pero además porque el juego no se trata solo de disparar, sino de cómo disparás.

El título inicia recalibrando tus ajustes de una manera bastante ingeniosa. Te muestran el arranque de booteo de una máquina y te dice que el sistema necesita calibración. Entonces, te pide que enciendas el sistema de audio, regulando el volúmen del juego, que inicies el sistema de video, ajustando los gráficos y finalmente que configures el sistema de mecánicas, permitiéndote seleccionar la dificultad del juego. Por último, aplicás los cambios y el sistema menciona el ID del robot; V1, robot que ahora controlás.

Un infierno retro y brutal

El apartado visual de ULTRAKILL evoca los primeros FPS de los 90′ en 3D con gráficos low-poly, pero con iluminación moderna y efectos estilizados que lo hacen destacar. Su paleta de colores varía dependiendo del nivel, con un uso magistral de luces rojas y neón en escenarios que crean una atmosfera perfecta en cada nivel, dándole personalidad y algo único a cada zona del inframundo.

La dirección artística bebe tanto del imaginario religioso como de lo grotesco y mecánico, creando una estética que se siente como un viaje por diferentes representaciones del infierno. Cada nivel en ULTRAKILL se siente diferente, con escenarios que van desde ruinas desmoronadas hasta fortalezas infernales gigantescas. Además, el diseño está pensado para fomentar la exploración, con atajos, secretos y caminos alternativos.

Pintá el mundo de rojo

En la mayoría de los shooters, la curación se basa en botiquines o regeneración pasiva. ULTRAKILL rompe el molde: para recuperar vida, tenés que bañarte en la sangre de los enemigos. Esta mecánica no solo es original, sino que te empuja a mantenerte en la acción. Cuando estás al límite, la mejor opción no es retroceder, sino lanzarte de lleno al combate.

Por otro lado, las mecánicas de movimiento están diseñadas para recompensar el dinamismo. No se trata solo de esquivar ataques, sino de acercarte estratégicamente a los cadáveres para absorber esa vitalidad que ofrecen. Es brutal, es sanguinario y, sobre todo, aumenta el frenetismo del juego, obligándote a moverte constantemente para sobrevivir.

Una vez que domines lo básico, verás cómo la velocidad se convierte en tu mejor aliada. Podrás ejecutar maniobras avanzadas—desde wall jumps y slide boosts hasta el infame bunny hop—movimientos que evocan la esencia de los shooters arena de los 90, pero con una precisión moderna.

Claro, el movimiento es fundamental, pero en un buen shooter lo esencial son las armas. Y ULTRAKILL no decepciona: ofrece una variedad impresionante que complementa su estilo agresivo, su arsenal te reta a experimentar y crear combos devastadores que te harán adicto a cada enfrentamiento.

¿Quién necesita recargar?

En ULTRAKILL no hay descanso, no hay respiro, es por eso que las armas no tienen munición alguna. Podés disparar indefinidamente hasta el hartazgo o hasta que se te rompa el clic del mouse, todo esto con el fin de que la fiesta nunca termine y te encargues de eliminar a todos los demonios y máquinas del infierno sin detenerte a recargar. Pero disparar constantemente la misma arma todo el tiempo no sería muy canchero de tu parte. Así que dejame contarte de las armas del juego.

La primer arma que ULTRAKILL nos entrega es el Revolver Piercer, es una pistola con daño decente que te va a acompañar durante los primeros niveles del prólogo. Lo interesante de cada arma radica en su disparo secundario: mientras mantenés presionado el botón derecho, el revolver carga su potencia, y al soltar, lanza un disparo cargado capaz de atravesar a varios enemigos alineados.

Además, en su última actualización, ULTRAKILL incluye 5 armas base. Quizás pensés: “¿Solo 5? Pero Doom tiene más!”. La gracia está en que cada una viene con 3 variantes completamente distintas, lo que se traduce en un total de 15 opciones, sin contar las versiones alternativas. Entre estas armas están: el ya mencionado revolver, escopetas, minigun de clavos, arma de rayos y lanzacohetes.

Cada variante se consigue a través de una Terminal que vas a encontrar al comienzo de cada nivel. En la misma no solo podés ver un compendio detallado de cada enemigo derribado —conociendo sus puntos débiles y particularidades—, sino que también podés invertir los puntos obtenidos según tu rendimiento (evaluado de la D a la P; P siendo «Perfect«) al final de cada nivel, para desbloquear mejoras y potenciar tu arsenal.

La maestría en cada combate

El sistema de rangos de estilo evalúa no solo la cantidad de enemigos eliminados o el tiempo invertido, sino la «elegancia» con la que te desenvolvés en el combate. Es la perfecta fusión entre rapidez, precisión y creatividad, haciendo que cada enfrentamiento se sienta como una obra de arte violenta. En ULTRAKILL, cada enfrentamiento es un escenario donde la habilidad se transforma en puro espectáculo, invitándote a perfeccionar tus movimientos y a superar tus propios límites.

La magia de ULTRAKILL viene al combinar las diferentes armas de tu arsenal para crear combos brutales y espectaculares. Casi todas las armas son capaces de trabajar en conjunto y hacer sinergia entre sí, el juego premia la destreza y creatividad del jugador al permitirle experimentar combinaciones de armas para crear combos destructivos mientras te movés a gran velocidad y vas realizando parrys. Y sí, también podés hacer parry!

Reflejos de máquina, destrucción divina

En ULTRAKILL podés pegar puñetazos, lo que te permite hacerle parry a TODO, o bueno, casi todo. Esta mecánica es esencialmente importante de aprender a dominar en ULTRAKILL, es la única otra forma de curar tu salud, además de poder absorber la sangre de tus enemigos, devolver un ataque también te cura una porción de la vida. Así que siempre que veas una oportunidad de hacer un parry; hacelo.

Ya sean proyectiles que se dirigen hacia vos, golpes, patadas, mordiscos, disparos de escopetas de otros robots o incluso, ¡tus propios disparos de escopeta!, todo lo que te parezca que se le puede parrear, seguramente se pueda. Siempre vale la pena intentar hacerle parry a algo, ya sea para aprender a contrarrestar el ataque de algún enemigo o para regenerar salud en medio de un intenso combate en una sala llena de demonios y máquinas o contra un Boss.

Puro frenesí industrial

La música, compuesta por Hakita, es una mezcla de industrial metal, synthwave y breakcore, perfecta para el ritmo acelerado del juego. Cada tema refuerza la sensación de urgencia y violencia, haciendo cada nivel, cada combate y cada encuentro con un boss un concierto de metal en el infierno. La batería que acelera el corazón y las guitarras que dan ganas de saltar al inframundo y pelearte con toda criatura que se te acerque hacen que la banda sonora de ULTRAKILL sea una montaña rusa de emociones y pura adrenalina.

Mientras jugaba ULTRAKILL hubieron muchos momentos donde me detuve a escuchar la música, pero el juego funciona de una manera que solamente cuando estás en un enfrentamiento las canciones se vuelven mucho más pesadas, con guitarras y sonidos sintéticos fuertes que te hacen decir «Hell yeah», lo que me obligaba a avanzar y seguir encontrándome con grupos de demonios para que la música no pare. Imaginate estar moviéndote a toda velocidad mientras disparás todo tu arsenal de armas para matar demonios mientras un recital infernal se escucha a la par de tu masacre. Simplemente hermoso.

Un viaje al infierno (literal y metafóricamente)

Si bien el juego no se enfoca en la narrativa tradicional, haciendo algo parecido al Doom o incluso Half-Life, es decir, contarte una historia sin la necesidad de detenerte en una cinemática. En ULTRAKILL la historia es secundaria (o incluso terciaria) pero el lore está ahí para quienes quieran descubrirlo. Sin embargo todo comienza con las palabras: «MANKIND IS DEAD – HELL IS FULL – BLOOD IS FUEL»

V1, nuestro protagonista, es un robot alimentado por sangre en un mundo devastado por una guerra interminable. La Última Guerra, un conflicto que duró casi 200 años, dio origen a máquinas como el GUTTERMAN ruso y el colosal EARTHMOVER japonés, creaciones destinadas a cambiar el curso de la humanidad.

Tu objetivo es ir descendiendo a través del infierno y enfrentando a criaturas inspiradas en la mitología cristiana y la Divina Comedia. Hay referencias filosóficas y religiosas que pueden pasar desapercibidas en la primera partida, pero añaden una capa de profundidad interesante. Este trasfondo, aunque secundario, añade profundidad al universo caótico y sangriento del juego.

No es un paseo por el infierno

ULTRAKILL no es un juego fácil ni está diseñado para todo el mundo. Su brutalidad no solo radica en su violencia extrema, sino en la exigencia de su jugabilidad. No hay regeneración de vida pasiva ni momentos de descanso: la única forma de sobrevivir es atacando sin tregua y dominando cada mecánica.

Desde el primer nivel, el juego te lanza al caos sin explicaciones extensas. No hay tutoriales largos ni ayudas innecesarias. Es un juego que espera que aprendas sobre la marcha, que mueras, que vuelvas a intentarlo y que mejores con cada intento. Y si bien el combate es intuitivo, la verdadera profundidad se descubre cuando empezás a jugar con fluidez, combinando disparos, parrys y maniobras avanzadas.

Pero la dificultad de ULTRAKILL no solo se basa en la velocidad del combate. Sus jefes son implacables, sus enemigos se vuelven cada vez más letales y la curva de aprendizaje no perdona. No es un shooter en el que puedas esconderte detrás de una cobertura y esperar el momento perfecto para disparar. Acá, cada error se paga caro, y el juego te desafía a mejorar constantemente.

Este no es un FPS casual ni una experiencia relajante. Es un juego diseñado para quienes disfrutan del reto, para quienes ven la muerte como un aprendizaje y el combate como una danza de precisión y brutalidad. Si buscás una experiencia tranquila o pausada, ULTRAKILL no es para vos. Pero si te gusta la adrenalina pura y la satisfacción de dominar un sistema de juego exigente, entonces encontraste tu próximo vicio.

Lo mejor y lo peor

• Aspectos Positivos:
  • Divertido a más no poder
  • Jugabilidad rápida, fluida y extremadamente satisfactoria
  • Sistema de puntuación que premia la creatividad
  • Excelente diseño de niveles y jefes
  • Estética retro con toques modernos
  • Opciones de juego súper personalizables
  • Banda sonora brutal
• Aspectos Negativos:
  • Dificultad elevada para gente novata
  • La estética puede no ser para todo el mundo

Experiencia general y conclusión

Nota: 9.5/10

No puedo estar más contento con ULTRAKILL, es un juego que tiene muchísimo amor y cariño de parte de su desarrollador. Los niveles, la música, el diseño, el lore, el gameplay, todo está pulido para que sea divertido y adictivo. El juego me lo pasé al 100%, haciendo todos los secretos y sacando todas las P rank en cada nivel de lo entretenido que es. Y otra cosa es que los niveles secretos del juego son un cago de risa, llenos de referencias y chistes.

No puedo ser objetivo con la nota porque el juego no está terminado y todavía le falta contenido, pero te aseguro que ULTRAKILL tiene horas para entretenerte y sabe cómo hacerte pasarla bomba. Y como si esto fuera poco, mientras terminás de leer este análisis, el creador sacó una actualización grande, lista para estar en tus manos. Si buscás una experiencia desafiante y retadora no pierdas más tiempo; limpiá el infierno y bañate en la sangre de tus enemigos.